Muchas veces no somos conscientes de la cantidad de comida que desperdiciamos diariamente.

Más allá de la responsabilidad moral que podamos tener hay algo que nos afecta a todos por igual y es que la comida vale dinero; así que cuando tiramos productos alimenticios a la basura es como si estuviésemos quemando billetes.

 1. Escribe la lista de la compra antes de salir de casa y nunca con hambre. Si vas al supermercado sin rumbo fijo es fácil comprar más de lo que de verdad necesitas y si hablamos de productos frescos es fácil que se deterioren estando aun intactos.

 2. Revisa siempre la fecha de caducidad de los productos y coge los que caduquen más tarde.

 3. Cuidado con el orden en la despensa. Deja los productos más recientes en la parte de atrás y los más antiguos en la parte de delante. Así tendrás los productos que caducan antes más a la vista.

 4. Conserva los productos en su recipiente y lugar adecuado. Así productos como el arroz, el azúcar o la pasta duraran más si los introduces en recipientes herméticos o los envases de queso y fiambres, envuélvelos en papel de plata una vez abiertos.

5. Más vale que falte y no que sobre. Lo que introducimos en el plato más tarde no se puede recuperar. Mejor es poner pequeñas raciones y si se queda con hambre siempre se puede repetir.

 6. No tires las sobras. Busca por internet, hay miles de recetas para recuperarla: tortilla de macarrones, croquetas de pollo, ropa vieja...

 7. No limpies las verduras ni frutas antes de guárdalas en el frigorífico. Lo vegetales se deterioran antes si están húmedos.

 8. Puedes congelar la verdura fresca, únicamente debes hervirla previamente durante unos 5 minutos.

 9. El pan de molde mejor conservarlo en el frigorífico.

 10. Piensa en dinero, no en comida. Muchas veces no somos conscientes del dinero que desperdiciamos en forma de comida. Ese yogur caducado = 25 céntimos, ese plato de macarrones por la mitad = 50 céntimos. Si sumásemos todo el dinero que desperdiciamos en comida al cabo del mes, más de uno se sorprendería.

Uno de los lugares más seguros de la tierra es nuestra propia casa, pero desafortunadamente hay gente que se empeña en que esto no sea así. Robos hay de muchos tipos, sigilosos, a la fuerza, en chalets, en edificios, en residencias de verano…

 Simplemente siguiendo unas pequeñas pautas será más sencillo prevenir nuestro hogar de robos.

 1. Asegúrate de cerrar bien puertas y ventanas. Cierra la puerta siempre girando del todo la llave, sobre todo por las noches y cuando no estés en casa.

 2. Invierte todo lo que te sea posible en seguridad pero se sutil. Si todo tu sistema de seguridad es visible desde el exterior, estas dando a entender que dentro de tu casa escondes cosas de mucho valor y llamaras la atención a los posibles ladrones.

 3. Instala una buena puerta. La inversión vale la pena. Puertas blindadas, con mirillas, sin espacios entre el suelo y el inferior de la puerta, 2 o más puntos de cierre...

 4. Si vives muy alejado de la ciudad o pasas largas estancias fuera de casa, instala una alarma electrónica. 

5. No dejes nunca las llaves escondida en macetas, buzones etc. Mejor que busques otra opción como dejarle un par de llaves a algún vecino de confianza o los ladrones lo tendrán muy fácil.

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 6. No dejes las persianas cerradas del todo.

 7. Si vives fuera del núcleo urbano no escatimes en alumbrado por las noches y busca un buen perro guardián.

 8. Si te gusta dormir con las ventanas abiertas en verano, instala rejas de seguridad si vives en plantas bajas o apartamentos donde se pueda acceder fácilmente.

 9. No dejes objetos de valor a la vista, como puede ser en terrazas, patios, ventanas...

 10. No desconectes totalmente la electricidad, un timbre que no suena es sinónimo de casa deshabitada.
 
11. Cuidado con las redes sociales, no comentes en los perfiles que vas a estar fuera de casa un tiempo prolongado y mucho menos avisando que día te vas. Si quieres presumir de vacaciones mejor cuando vuelvas de ellas.

 12. Pide a algún vecino, conserje, amigo... que recoja tu correo y no se quede almacenado en los buzones.

13. No abras la puerta a desconocidos que tocan al telefonillo, si no estabas esperando la visita de ningún técnico no le dejes pasar a nadie.

 14. Si ves algún tipo de marca en tu portal, puerta , buzón ... o notas que un vehículo desconocido permanece largas horas alojado cerca de tu casa con gente en su interior, comunícaselo a la policía.

 15. Si has adquirido un nuevo piso, ya sea segunda mano o nueva construcción, cambia el bombín de la puerta. Nunca sabes por donde pueden haber pasado esas llaves.

 Y a todo esto hay que añadir 2 consejas más. Fotografía todos tus objetos de valor para agilizar su búsqueda en un hipotético robo y nunca toques nada si notas que te han robado, llama rápidamente a la policía para evitar modificar posibles pistas.